La Audiencia Provincial de Huesca juzga desde el miércoles a un hombre y a una mujer, vecinos de Jaca, por la muerte de su bebé de tres meses. Este jueves, varios médicos han coincidido en que los síntomas que causaron la muerte del niño, sí serían compatibles con el síndrome del zarandeo. El fiscal pide 5 años para cada uno.
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Hasta cinco facultativos han confirmado la hipótesis del zarandeo,
incluidos los radiólogos que atendieron al pequeño en el Hospital Miguel Servet
de Zaragoza. Aseguran también que en el TAC se confirmaron dos hematomas en el
cerebro: uno reciente y otro más antiguo. De hecho, uno de los radiólogos ha
apuntado directamente a que estas lesiones eran traumáticas: "Puede tener
hasta tres o cuatro semanas de evolución".
La defensa de los padres del pequeño mantiene que en todo
momento lo trataron con cuidado y que tan solo le hicieron lavados nasales. Los
padres declararon ayer que el bebé estaba enfermo y que no lo zarandearon.
Los hechos se produjeron el 22 de febrero de 2022. El bebé
ingresaba en el hospital de Huesca, con un proceso catarral a causa del covid,
pero nada fuera de lo normal. Unos días después, sufre una crisis y llega al
Hospital Infantil de Zaragoza entubado y con signos de hipertensión
endocraneal.
"Cuando zarandeas a un lactante, él no es capaz de
sujetar la cabeza y es como que el cerebro choca contra el cráneo y es eso lo
que genera el daño", ha explicado uno de los médicos de la UCI Pediátrica
del Servet presente en el juicio.
Ha recalcado en varias ocasiones que no tiene por qué haber
intencionalidad. Los padres, en todo momento, han mantenido que trataron al
niño con cuidado. El miércoles próximo continuará
el proceso judicial.
JACATIMES
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