El esperado telecabina que unirá las estaciones de Astún y Candanchú sin necesidad de carretera no abrirá hasta, como pronto, la temporada de esquí 2027–2028. Alegaciones administrativas, ajustes técnicos y una obra complementaria en Astún obligan a reformular el calendario previsto.
![]() |
ARCHIVO JT |
Las obras, que debían
comenzar este otoño, se retrasan al menos un año. Los técnicos sitúan ahora la
puesta en servicio del telecabina Astún–Candanchú en la temporada 2027–2028,
según las últimas previsiones. El Proyecto de Interés General de Aragón (PIGA),
imprescindible para iniciar los trabajos, se ha demorado por la presentación de
alegaciones y por informes de organismos como la Confederación Hidrográfica del
Ebro y la Dirección General de Urbanismo.
El documento
reformulado se elevará al Consejo de Gobierno de Aragón en octubre, y solo tras
su aprobación definitiva podrá firmarse el acta de replanteo para iniciar las
obras. Sin embargo, la llegada del invierno impedirá trabajar en altura, por lo
que el grueso de los trabajos —pilonas, cableado y montaje de cabinas— se
concentrará entre la primavera de 2026 y el verano de 2027.
A los retrasos
administrativos se suma una obra adicional en Astún, necesaria para desplazar
el final del telesilla Pastores y evitar interferencias con el nuevo trazado.
Este ajuste tiene un coste de 259.408 euros y un plazo estimado de cuatro
meses. El contrato principal de la telecabina asciende a 29,76 millones, de los
que diez provienen de fondos europeos que, según el Gobierno de Aragón, no
peligran.
La empresa
adjudicataria, Teleféricos y Nieve SL (filial de Leitner), mantiene los
preparativos. Dispone de 22 meses para ejecutar la obra y ya ha iniciado la
fabricación de componentes. Mientras tanto, se resuelven cuestiones logísticas,
como el acopio de materiales en el aparcamiento de Pista Grande de Candanchú, y
se confía en que la infraestructura pueda estar lista para conectar ambas
estaciones en la temporada 2027–2028.
MARGARITA / JACATIMES
0 Comentarios