La muestra al aire libre repasa el evento que llevó 75 mujeres al valle de Chistau y marcó un antes y un después en la lucha contra la despoblación y la vida del pueblo, generando más de 40 bodas y la reapertura de la escuela. Todo un éxito.
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VICECOM | Esperando la llegada del autobús con las mujres |
Las imágenes, plastificadas para resistir las inclemencias,
se distribuyen a lo largo de la calle del Barranco, en la subida hacia la
iglesia. Allí se repasa aquel anuncio publicado en prensa (“Se necesitan
mujeres con fines matrimoniales...”), la fiesta inolvidable que generó atención
mundial y el impacto que tuvo en el valle de Chistau, donde por entonces no
había ni niños en la escuela.
Además de las fotos de 1985 y del 25º aniversario, la
muestra recoge cartas llegadas de medio mundo, recortes de prensa internacional
y referencias a la película que inspiró la idea, Caravana de mujeres.
También se ha convocado un exitoso concurso de relatos y no se descarta crear
un museo permanente, si logran financiación.
“La Caravana fue un cambio de mentalidad, no algo frívolo”,
subraya Ángeles Ferrer, presidenta de la asociación, que recuerda cómo los
vecinos acogieron incluso a madres solteras en un momento en que eso era
impensable. “Esperamos llegar al 50 aniversario y seguir recordando lo que
supuso para Plan”.
MARGARITA / JACATIMES
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