La policía francesa no descarta que Cedric Tauleygne, el presunto asesino de una pareja cerca de Tarbes, esté oculto en algún punto de los Pirineos o huido en otro lugar, y continúa con las investigaciones. Se le perdió el rastro tras abandonar su motocicleta cerca de la peña Oroel.
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| EFEGE |
La Gendarmería del país vecino no abandona las
investigaciones en busca de cualquier indicio que conduzca a la detención del
asesino de la pareja de profesores de instituto, en una pequeña localidad
próxima a Tarbes. Ella estaba en trámites de separación del huido.
Se trata de conocer los pasos que dio el asesino una vez
entrado en España por el túnel de Somport, en la casi seguridad de que está escondido o dado a la fuga —una
vez se deshizo de su motocicleta—,
con el apoyo de alguien en la Jacetania, zona que conocía bien por sus
actividades en bicicleta.
Cedric es un reservista de la
Gendarmería y paracaidista, y se supone que podría haber planificado
su fuga en detalle y con antelación, para dificultar su localización. Es
especialista en supervivencia en la naturaleza en condiciones difíciles.
Tras cometer el crimen, se puso en contacto telefónico con
la Gendarmería anunciando su intención de suicidarse, hipótesis pronto descartada,
pudiendo tratarse de una cortina de humo para enmascarar sus verdaderas
intenciones.
Los investigadores creen que porta aún el arma del crimen,
con la que probablemente se defendería en caso de verse acosado. Obviamente, es
un tipo peligroso, por lo que la Gendarmería no dudó en solicitar la ayuda de
la Guardia Civil y Policía Nacional.
Más de un mes después de los hechos, continúan las pesquisas y
averiguaciones en el entorno del sospechoso, en Francia y en España, para determinar
cómo planificó su huida y quién le ayudó.
Cualquier persona que observe algo extraño o le parezca
haber visto al fugitivo, debe llamar inmediatamente a los teléfonos de la
Guardia Civil o la Policía Nacional, 062 y 091.
JACATIMES
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