Todos a salvo, con algún susto, en la nueva tanda de rescates de cuatro días de los GREIM. Un parapentista con la vela colapsada y un jinete caído del caballo son dos tipos de rescate de nuevo cuño este verano, que llaman la atención en la tanda de quince, entre el 29 de julio y 1 de agosto.
OPC GC
Sin respetar el orden cronológico, nos referimos en primer
lugar al parapentista francés de 24 años al que se le colapsó la vela del
parapente el lunes 29, incidente que acabó con suerte y con heridas
superficiales en el pómulo derecho y ojo y magulladuras en el pie. Los GREIM de
Benasque se ocuparon de él en la zona del pico del Alba. Terminó marchando por
sus propios medios.
En segundo lugar, el caso del cordobés de 46 que,
practicando equitación en el collado de Grosín, en Jaca, se cayó del caballo, resultando
con un fuere dolor de espalda. El equipo de rescate de Jaca le echó una mano,
dejándole a buen recaudo en el hospital de la ciudad.
Los senderistas vuelven a protagonizar este relato. Uno de
los dos de Amposta que andaban por la zona de Bujaruelo, parece que sufrió una
angina de pecho. Los GREIM de Boltaña, con UA y sanitario se ocuparon de que
una ambulancia los trasladara al San Jorge. Otro senderista se desoriento en el
mirador de Pichirillo sin consecuencias, pudiendo continuar por sus medios
desde Benasque.
Otro más, navarro de 42, con posible luxación de hombro,
encaminado desde Boltaña, al hospital de Jaca. Dos senderistas aún, de Lérida y
Madrid, acabaron con fractura de tobillo el uno y golpe de calor el otro,
rescatados por los equipos de Panticosa y Benasque respectivamente. Terminamos
con un francés, 52, que podía sufrir un infarto en el ibón superior de Brazato,
evacuado al Miguel Servet por los GREIM de Panticosa, y un guipuzcoano de 74,
desorientado e ileso en el pico Foratata, auxiliado igualmente por los de
Benasque.
En el capítulo de montaña, un francés, 52, sufría mucho
cansancio y taquicardia a la altura de los ibones Azules de Panticosa, tras una
marcha de tres días por el G-11. Los GREIM de allí mismo se ocuparon de lo
necesario para que fuera trasladado al San Jorge. El segundo rescate se produjo
en monte Perdido, donde un vizcaíno, 25, sufrió una fractura de tobillo.
Auxiliado por los GREIM de Boltaña, acabó en el hospital de Jaca.
Una escaladora de Zaragoza de 58 años, con mareos en la vía
Molondro, cerca del balneario. Una vez localizada, la evacuaron en helicóptero
y fue transferida en ambulancia al hospital de Jaca.
Terminamos esta crónica con tres barranquistas que, en el
Miraval Inferior, en la cabecera del Foriga y en el Vero, sufrieron
respectivamente una rotura fibrilar en un gemelo, un esguince de tobillo y otro
de rodilla. Al primero lo evacuó el equipo de Boltaña y a los otros dos el de
Huesca. El primero, francés de 49 años, recaló en el hospital de Tella y los
otros dos —de Barbastro, 55,
y de Holanda, 42—, en el de
Huesca.
Todos los avisos recibidos en la centralita 062 de la Guardia Civil de Huesca y equipos de rescate formados, la mayoría, por GREIM más UA y sanitario o médico 061.
OPC GC / JACATIMES
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