Sobre las 17:00 h del sábado, la Guardia Civil recibió un aviso indicando que dos hombres y dos mujeres que se encontraban realizando el barranco Lazas, uno de los más difíciles de la zona de Vadiello, habían tenido problemas mientras rapelaban. Uno de ellos se había quedado colgado en mitad del descenso.
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| OPC GC |
Se dirigen al lugar GREIM de Huesca, helicóptero de la
Guardia Civil y médico del 061 que, una vez en el área, sobrevuelan el lugar y localizan
a dos barranquistas colgados de la cuerda. Uno se encontraba bien ya que tenía
los pies en una repisa, pero otra se encontraba suspendida en el aire, en mitad
de una canal, donde el agua fría le estaba cayendo en forma de lluvia intensa.
En un principio se intentó realizar un ciclo de grúa
convencional, pero no se consiguió llegar hasta la mujer colgada de la cuerda,
aun desplegando los 50 m de cable de los que dispone la grúa del helicóptero, teniendo
que rapelar desde ese punto con una cuerda 20 m más hasta llegar a la
barranquista.
El hecho de estar a unos 70 m del helicóptero resulta una
maniobra sustancialmente difícil para el especialista que está suspendido. Sin
llegar a cortar las cuerdas que la sujetaban, consiguió desprenderla de su
atadura y asegurarla rápidamente, procediendo a su evacuación hasta una zona de
depósito. La barranquista
apenas podía andar y hablar, ya que se encuentra totalmente mojada y con
evidentes síntomas de hipotermia, por lo que se intentó que entrase en calor.
El hecho de haber realizado el rescate de la accidentada,
con un ciclo de grúa combinado con un ciclo de cuerda, supuso evitar un grave
peligro para la vida de la mujer, que no podía
moverse por sus propios medios. El helicóptero la trasladó al hospital San Jorge de Huesca, con una hipotermia grado 2.
Nuevamente, los dos especialistas fueron helitransportados a lo alto del barranco, para evacuar a las otras tres personas, con el día muy nublado y oscureciendo. Sin poder contar ya con la
ayuda de la aeronave, tuvieron que descender el barranco de noche, unos 200
metros, hasta llegar al lugar donde estaban los barranquistas.
Se comprueba que la otra mujer que formaba parte del grupo
no se encontraba bien, con mucho frío en las manos y apenas sentía las
piernas, por lo que los especialistas, extremando la seguridad, procedieron a
su descenso.
Una vez todos juntos, se prosiguió la bajada del barranco que,
al ser muy técnico y difícil, obligó a que los especialistas tuvieran que extremar las
medidas de seguridad y avanzar muy lentamente. Conscientes de la dificultad del
rescate, otros dos especialistas del GREIM de Huesca se dirigieron al lugar
para apoyar a sus compañeros. Su participación en la parte final del rescate
resultó fundamental.
Los rescatados son dos mujeres de 50 y 51 años y dos hombres
de 51 años y 53 años, todos ellos vecinos de Valencia.
OPC GC / JACATIMES
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