El Gob. de Aragón solicita del ministerio correspondiente del Estado Español un protocolo para el control, prevención y tratamiento de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE), que afecta ya a buena parte del territorio nacional y amenaza la viabilidad económica de las explotaciones ganaderas.
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| MINISTERIOAGRIC |
La Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE)
es una patología vírica infecciosa no contagiosa, transmitida por mosquitos,
y que puede afectar al ganado vacuno, ovino y caprino, y ciervos, gamos y corzos,
causando pérdida de peso, fiebre, cojera, erosiones orales, dificultad para
deglutir, eritema de la ubre… El Ministerio de Agricultura —que conoce la presencia de la
enfermedad desde noviembre del año pasado—, es quien tiene las competencias y debe habilitar con
urgencia un protocolo de actuación.
Se debe recordar que esta enfermedad no tiene ningún tipo de
riesgo sanitario para los humanos, ni en la transmisión, ni en el consumo.
Por ello, “es una grave irresponsabilidad por parte de quienes extienden
gratuitamente esta noticia, creando una alarma social que acaba por provocar gravísimos daños a los ganaderos. A estos son a los únicos que tenemos que
tener presentes en estos momentos, para apoyarles con medios, ayudas y todo lo
que necesiten”, afirman en la consejería.
Hay que recordar que la EHE es una enfermedad transmitida
por mosquitos del género Culicoides, es decir por el mismo vector que
otra vieja conocida, como es la enfermedad de la Lengua Azul. La gran
diferencia con la Lengua Azul es que, en su caso, se conoce bien en el sector y
se cuenta con vacunas frente a sus distintos serotipos y estrategia para su
control. En cambio, en la EHE, que históricamente ha circulado por América del
Norte, Australia, Asia y África, es la primera vez que entra en Europa, por lo
que no existen vacunas autorizadas frente a ella en la UE.
Última hora
Según manifestó el lunes el presidente del Colegio de
Veterinarios de Teruel, la enfermedad se está extendiendo entre la cabaña
ganadera de las tres provincias aragonesas, con especial intensidad en la de
Teruel, donde entre un 20 y un 40 % de explotaciones, según zonas, están
afectadas. Además, se han encontrado muertos 80 ciervos de la reserva de los
Montes Universales en Albarracín.
AH / JACATIMES
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