Los glaciares del Pirineo se derriten sin pausa. La Guardia Civil de Huesca investigó el hallazgo de unos restos supuestamente humanos en octubre pasado en el glaciar de Monte Perdido, en el Parque Nacional de Ordesa. Sin resultados concluyentes.
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El deshielo ha mostrado
unos fragmentos óseos de un cuerpo que aún permanece sin identificar. Un grupo
de científicos del IPE de Jaca lo descubrieron en el hielo cuando se encontraban trabajando
en la zona para realizar un estudio sobre la evolución del glaciar, informan
diferentes medios.
Entre los restos que se
encontraron hay pequeños trozos de huesos de diferentes partes del cuerpo y
objetos personales. Al final del verano de 2022, el mismo glaciar también sacó
a la luz un piolet que posiblemente corresponda a las primeras ascensiones a
esta montaña en el siglo XIX.
El caso se puso en manos del Juzgado de Instrucción y Primera Instancia de Boltaña, y los restos se enviaron al Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA).
En el registro de desaparecidos en el Pirineo figuran cuatro nombres. Uno de ellos desapareció precisamente cerca del glaciar de Monte Perdido, el expediente más antiguo que data de 2006, el de un alemán apellidado Kulosa, un alpinista de 44 años. Según algunos medios, las pruebas de ADN realizadas no han dado resultados definitivos
GN / JACATIMES
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