Se trata de una resolución publicada el martes en el BOA “por la que se inicia el expediente y se abre un periodo de información pública para la declaración como Bienes de Interés Cultural (BIC) de los órganos históricos aragoneses que se relacionan en el anexo”.
ALAMY |
El anexo lista 52 órganos que optan a ser declarados BIC,
diez de ellos en la provincia de Huesca incluyendo, claro está, el de la
catedral de Jaca, con ánimo de “proteger singularmente una serie de órganos
históricos aragoneses como ejemplos señalados de nuestro patrimonio cultural”.
Conocido desde la antigüedad clásica, el órgano, como
instrumento musical, ha evolucionado y adoptado múltiples variantes hasta la
actualidad. Como elemento ligado a la liturgia católica, es a partir del siglo
XIV cuando se documentan los órganos “parados” o no portátiles.
En la segunda mitad del siglo XV se produce el asentamiento
de los grandes órganos en los templos, primero en los de mayor rango y en los
monasterios, para generalizarse en las iglesias a lo largo del siglo XVI y
siendo indispensable para el culto durante el Barroco.
Es precisamente durante los siglos XVII y XVIII cuando se
conforman las escuelas europeas de organería, creándose diferentes tipologías
instrumentales según escuelas y países, entre las que destaca la alemana por el
uso de un cuerpo de pedal, o la española por las trompetas en batalla.
En la Europa católica los órganos han aportado un lenguaje
diferencial para acercarse a los fieles. De este modo, constituyen un
importante legado material formado por notables obras de arte, pero también un
relevante legado inmaterial como elementos transmisores de cultura.
Aragón destaca porque en su territorio se han conservado numerosas muestras excepcionales de órganos desde el siglo XV hasta el XX, con ejemplos representativos de todas las épocas y estilos, lo que constituye un legado cultural y patrimonial de primer orden.
El de la catedral de San Pedro Apóstol de Jaca es un modelo
de tubos, ibérico romántico de tradición, con caja barroca de Juan del Puey
(1703, Jaca) y órgano de Hermenegildo Gómez, representante de una corriente
avanzada de la organería ibérica romántica. Su monumental caja barroca presenta
una espléndida talla y el órgano supone un prototipo único de una organería
moderna de la segunda mitad del siglo XIX.
Para saber más sobre el órgano de Jaca, ver el documento "Importantes páginas para la historia del órgano español", desde aquí mismo.
La protección de estos 52 órganos, considerados los más
relevantes de Aragón, como Bienes de Interés Cultural, es imprescindible para
garantizar su conocimiento, difusión y conservación, como testimonio
irremplazable de nuestro patrimonio cultural.
Más detalles en el BOA del 15, accesible desde
aquí mismo.
BOA / JACATIMES
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